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Cuando era maestra en una escuela católica para niñas en Monterrey, México, estaba hablando con mis alumnas de cuarto grado sobre la importancia de la Pascua para todos los cristianos. Les explicaba que, gracias a que Jesús murió y luego resucitó de entre los muertos, nosotros tenemos la posiblidad de ir a cielo y vivir eternamente con él.
Las niñas de ocho y nueve años se mostraban interesadas en lo que yo les decía y, con sus comentarios y expresiones, me daba cuenta de que estaban de acuerdo con lo que les enseñaba. Todo iba bien hasta que les dije que la Muerte y Resurrección de Jesús nos trajo la salvación y, por lo tanto, la Pascua es considerada como la fiesta más importante del año para los cristianos.
Tan pronto como terminé de hablar, vi como los ojos de mis veintisiete alumnas se abrieron como platos e inmediatamente todas levantaron la mano para pedir la palabra. Era obvio que para ellas, la fiesta más importante del Año de la Iglesia era la Navidad. ¡El mismo Papa Francisco tenía quince años cuando escuchó por primera vez lo que yo les decía a mis alumnas!
Les expliqué, usando lenguaje que pudieran comprender, que “Si Cristo no hubiera resucitado, vana seria nuestra fe” (I Corintios 15, 14). Comentamos que, si Jesús no hubiera resucitado y sus promesas no se hubieran cumplido, los hombres dudaríamos que realmente fuera Dios. Finalmente les dije que la Pascua es sumamente importante para los cristianos porque es la celebración del amor infinito que Dios tiene por nosotros.
Quizá mis alumnas no lograron comprender plenamente lo que comentamos ese día. Yo les pedí que guardaran mis palabras en su corazón y juntas le pedimos a Jesús que nos diera la gracia de experimentar el gozo de su Resurrección y la esperanza de la vida eterna.
Oremos: Te damos gracias, Señor por tu sacrificio de amor en la cruz, por tu gloriosa Resurreción y por tu misericordia infinita. Ayúdanos a reconocer la magnitud de tu amor por nosotros para que podamos compartirlo con los niños que están bajo nuestro cuidado. Amén.
Imagen: iStock.com/anikakodydkova
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