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El Evangelio para este domingo nos desafía a ser generosos y cuidar de quienes necesitan ayuda. Jesús nos cuenta el relato de un mendigo, Lázaro, que vivía fuera de la casa de un hombre rico. Lázaro pidió ayuda por años, pero siempre fue ignorado. Lázaro finalmente halló consuelo en el cielo al morir. El hombre rico murió y fue al infierno y le rogó a Abraham que tuviera misericordia, así como Lázaro le había rogado a él. Abraham reprendió al hombre rico por sus acciones durante su vida y por no hacer caso de las advertencias en las Sagradas Escrituras. Jesús nos recuerda que recibimos todos los recursos en nuestra vida para comprender que Dios desea que nos sirvamos mutuamente. Dedique tiempo esta semana a reflexionar sobre las medidas que la familia puede tomar para ser más conscientes de las maneras en que pueden compartir el amor de Dios con los demás.
Visita El Evangelio en el hogar (inglés y español) para encontrar actividades para la familia y temas para iniciar conversaciones sobre el Evangelio de este domingo.
Imagen: Fyodor Bronnikov, Public domain, via Wikimedia Commons
