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El 14 de agosto, la Iglesia católica celebra la Memoria de San Maximiliano María Kolbe, Presbítero y Mártir. Él fue un sacerdote y fraile franciscano polaco, quien fue enviado al campo de concentración de Auschwitz durante la ocupación alemana en Polonia. El Padre Maximiliano servía a sus compañeros en prisión y les daba esperanza. Cuando los soldados seleccionaron a diez hombres para ser sentenciados a morir de hambre como castigo por el intento de escape de otro prisionero, Kolbe se ofreció como voluntario para tomar el lugar de un hombre que tenía familia. Maximiliano Kolbe fue canonizado en 1982 por el Papa Juan Pablo II, quien también era polaco, y es considerado como patrono de las familias. El prisionero a quien San Maximiliano salvó asistió a su canonización.
Amado Señor, te pedimos por las familias que están separadas a causa de la guerra, encarcelamiento o desplazamiento. Otórganos la valentía para defender la unidad y santidad de nuestras familias. Amén.
Oremos también a la Santísima Virgen María, cuya Asunción a los cielos celebramos esta semana, el 15 de agosto.
Madre María, tu Asunción al cielo es un signo de la promesa del cielo para todos nosotros. Te rogamos que unas tu oración a la nuestra para que nuestras luchas terrenas terminen en la presencia celestial de Dios, ¡para siempre! Amén.
Imagen: CPP/CIRIC (#73604), Anna/stock.adobe.com
